Varios estudios de medicina revelan que dormir bajo una manta mejora la calidad del sueño y puede ayudar a las personas que sufren de ansiedad y, o insomnio.
Es por todos conocido que la calidez y el confort que una manta nos procura nos hace sentir seguros y a salvo durante la noche. Desde siempre, cuando los niños tenían miedo a la oscuridad se tapaban con mantas para protegerse del miedo. Esto sigue siendo así cuando crecemos.
Son muchas las razones por las cuales nos sentimos protegidos debajo de la manta:
- La sensación de seguridad que nos aportan desde la infancia.
- El efecto calmante que nos proporcionan.
- El efecto regulador de la temperatura corporal en la fase REM profunda del sueño, que evita que nos despertemos en esa fase reparadora tan importante.
- La sensación de ser invencibles y de que nadie ni nada ajeno puede tocarnos mientras dormimos.
- La total relajación que proporciona.
- La sensación de calidez y de abrigo.
- El control de la luz y de los ruidos.
- La protección frente a los insectos.
Si además esa manta protectora es de biofotones será una gran ayuda para nuestra salud.
Los biofotones son partículas de luz que nuestro organismo absorbe del sol pero que también produce. Solemos tener menos de los necesarios para que nuestro cuerpo esté en equilibrio. Por eso nuestras mantas con carga de biofotones nos brindan un aporte de vitalidad y salud para todo el organismo, ayudando en la regeneración del cuerpo y estimulando sus poderes curativos, lo que nos aportará grandes beneficios.
Sienta la enorme sensación acogedora y de bienestar de nuestras mantas de Biofotones. ¡Amplia gama de medidas y colores!
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