No solemos prestar mucha atención a nuestras articulaciones hasta que nos dan problemas, es decir, cuando sentimos dolor.
Tenemos un cuerpo articulado que nos permite realizar los movimientos, es decir que nuestras articulaciones son esenciales y las hemos de cuidar con prevención para que nos duren toda la vida y no tengamos que enfrentarnos a cirugías de prótesis de reemplazo de articulaciones en el futuro. El objetivo es por tanto, mantener las articulaciones sanas y flexibles.
No olvidemos el peso que han de soportar las articulaciones de nuestra cadera, rodilla, tobillos tan sólo por el simple hecho de andar, multiplicando varias veces nuestro peso corporal en cada apoyo. Con según que movimientos bruscos han de soportar enormes cargas. Todo esto supone una gran tensión para las articulaciones y para los cartílagos y un desgaste mecánico por tanta actividad acumulada.
Sin embargo, mantenernos activos es lo principal, para no perder fuerza y movilidad en ellas. Las actividades de bajo impacto como caminar, nadar, levantamiento de pesas moderado o entrenamiento de resistencia son muy recomendables. Es importante recordar que las articulaciones se deterioran con la vida sedentaria y mejoran con el movimiento o con el ejercicio adecuado, mientras que el ejercicio inadecuado las destruye aún más. También la alimentación es importante así como los hábitos de vida saludable.
Hemos de tener presente en nuestras rutinas diarias los cuidados básicos de las articulaciones y entender que hemos de evitar producirles daño y que el ejercicio físico es fundamental para eso, siempre que sea un ejercicio suave que no las fuerce y en el que no se produzca un aumento de las presiones.
Para esta finalidad contamos con nuestro mejor aliado, la máquina de fitness pasivo CHI-PRO Plus. Eficaz, cómoda y que ocupa poco espacio.
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